¿Qué son los excipientes?   

Los excipientes (o ingredientes inactivos) son ingredientes utilizados para transformar los compuestos activos en formas farmacéuticas adecuadas para la administración. Todos los productos farmacéuticos o nutricionales, ya sean comprimidos, cápsulas, líquidos, vacunas u otros, contienen excipientes. Simplemente no es posible formular estos productos sin usar aglutinantes, rellenos, estabilizadores y/o desintegrantes.  

Los excipientes farmacéuticos son sustancias distintas del ingrediente farmacológico activo (IFA) que se incluyen en el proceso de fabricación. Se añaden excipientes para facilitar el proceso de fabricación, proteger, apoyar o mejorar la estabilidad, o para la biodisponibilidad o la aceptabilidad del paciente.   

La elección de los excipientes adecuados es un factor determinante de la calidad y la funcionalidad de un producto farmacéutico.

¿Por qué son importantes los excipientes de un medicamento?

Los excipientes son los "héroes olvidados" de la industria farmacéutica. Son clave en la fabricación de medicamentos por varias razones. Algunos excipientes forman parte del sistema de administración del producto. Estos transportan el principio activo a la parte del cuerpo donde se pretende aplicar el fármaco.    

Otros excipientes evitan que el fármaco se libere demasiado pronto en lugares donde podría dañarse y causar irritación gástrica o malestar estomacal.    

También hay excipientes que ayudan a que un medicamento se desintegre en pequeñas partículas para alcanzar más rápidamente el torrente sanguíneo, mientras que otros protegen la estabilidad del medicamento, por lo que tendrá la máxima eficacia en el momento de su uso.    

Aunque técnicamente "inactivos" desde una perspectiva terapéutica, los excipientes farmacéuticos son elementos clave y esenciales de los medicamentos. En muchos productos, ya sean comprimidos, cápsulas, inhaladores o vacunas, los excipientes constituyen la mayor parte de la forma farmacéutica total.